1. Frotar limón sobre los dientes.
Este ácido daña el esmalte cuando se utiliza de forma continua y abusiva. La acidez del limón daña de forma progresiva el esmalte y lo decolora, haciendo que la pieza dental quede más expuesta a posibles caries y fracturas.
De hecho, cuando bebamos bebidas con un alto concentrado de limón, se recomienda beberlas con popote (metálico o de bambú) para que no estén en contacto directo con los dientes.
2. Cepillar con carbón activado o bicarbonato.
Aunque sí remueve manchas, el carbón activado es muy abrasivo y no hay tantos estudios que comprueben su eficacia. Si decides utilizarlo, lo más recomendable es que lo hagas una vez cada 15 días o una vez al mes.
Para saber más mitos y realidades que giran alrededor del carbón activado, consulta esta entrada de nuestro blog.
Respecto al bicarbonato que es uno de los remedios caseros más utilizados para blanquear los dientes, debemos saber que es altamente corrosivo y abrasivo, y que por tanto si lo utilizamos directamente sobre nuestras piezas dentales estaremos dañándolas.
3. Usar kits de blanqueo que venden por internet.
Hay muchos que contienen sustancias químicas que en ocasiones provoca sensibilidad dental, irritación de encías y erosión de esmalte. Siempre debe ser supervisado por un odontólogo. Además, estos remedios tienen un efecto falso blanqueante que desaparecerá a los pocos días.
4. Usar diario pastas blanqueadoras.
Las pastas dentales que prometen blanquear nuestros dientes cuentan con una proporción muy pequeña de activos de blanqueamiento dental. No obstante, al tratarse de pastas abrasivas pueden eliminar manchas exteriores y dar la impresión de que los dientes se vuelven más blancos pero en realidad desgastan el esmalte dental.
5. Aceite de coco
Los estudios científicos no han dado la evidencia clínica necesaria para demostrar que el uso del aceite de coco reduzca la incidencia de caries dental, blanquee los dientes o mejore la salud y bienestar oral. Hagámonos la pregunta: ¿Para que comprarías un nuevo producto para remover la biopelícula que cubre mis dientes cuando el cepillado y la pasta de dientes lo hacen mejor, y tienen toda una historia de estudios respaldándolos?
Recuerda,
NO porque sea «natural» significa que sea saludable
NO porque sea «natural» sería efectivo en lograr un blanqueamiento dental
MITO: Pensar que el blanqueamiento dental destroza el esmalte de los dientes.
Muchas personas que no se animan a dar el paso de hacerse un blanqueamiento no lo hacen por miedo a dañar sus dientes. Los blanqueamientos que no están controlados por expertos ni siguiendo las pautas adecuadas pueden hacer que los dientes se debiliten y se desgasten poco a poco. No obstante, un tratamiento profesional no tiene porqué dañar el esmalte ni provocar que se vuelvan más sensibles.
También recuerda que mientras te estés sometiendo a un procedimiento de blanqueamiento dental es aconsejable evitar consumir en exceso bebidas o alimentos como café o té y consumir tabaco. De lo contrario, la efectividad y durabilidad del tratamiento blanqueante se verán reducidas.
Entonces, ¿Cualquiera puede hacerse un blanqueamiento dental?
Los blanqueamientos no se recomiendan en menores de 15 años que aún no tienen el esmalte formado, embarazadas, pacientes con enfermedades periodontales o que se hayan sometido a muchas restauraciones, pacientes alérgicos a la fórmula blanqueante o pacientes que sufran retracción gingival.
Recuerda que el dentista deberá ser quien, tras estudiar el caso de cada paciente, recomiende o no este tratamiento.
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